procesión del silencio

Procesión del Silencio de SLP, la segunda de mayor importancia en el mundo

La Procesión del Silencio de San Luis Potosí es una de las celebraciones más importantes de la Semana Santa en México. Siendo uno de los eventos religiosos más relevantes del estado, con una asistencia turística y local de aproximadamente más de 160,000 personas, fue declarada parte le patrimonio cultural del estado de San Luis Potosí en el 2013.

Esta procesión conmemora la pasión y muerte de Cristo y a Nuestra Señora de la Soledad. Se realiza durante la noche del Viernes Santo (viernes 19 de abril, este año) a las 20:00 horas y comienza su recorrido en el Templo del Carmen, de donde es originaria la tradición, luego de que el sonido de una corneta convoca a la Guardia Pretoriana que marchará desde el Teatro de la Paz hasta la Iglesia del Carmen. La procesión dura más de cuatro horas y se abre paso por las principales calles del centro histórico.

Se le llama la Procesión del Silencio porque durante esta sólo los sonidos de tambores y cornetas pueden ser escuchados. Ninguno de los espectadores o participantes pronuncia palabra. Esta representación del Vía Crusis cuenta con estaciones marcadas por un paso de misterio junto con imágenes de la pasión.

​Los miembros de las diferentes hermandades se identifican con los colores de sus túnicas que corresponden a su parroquia para distinguirse así de cada una. Los Nazarenos son considerados los cofrades más notables; van ataviados con capirote, antifaz y capa, y entre ellos mismos se pueden notar diferentes características como aquellos que van descalzos para aumentar su penitencia, los que portan cruces y los que llevan consigo elementos representativos de la hermandad. Todas las cofradías participan como acto de penitencia, por eso es que algunos llevan el rostro cubierto o hasta cadenas atadas a los tobillos. En la procesión participan tanto adultos como niños.

La Procesión del Silencio fue establecida de manera oficial en 1955 por Monseñor Joaquín Antonio Peñalosa Santillán y se deriva de la devoción de los toreros potosinos a la Virgen de la Soledad. Fray Nicolás de San José fue quien diera inicio a la primera de estas procesiones el 16 de abril de 1954. En la actualidad, esta es la única procesión en México en la que se representan todas las estaciones del Vía Crusis y tiene sus fundamentos en las procesiones de Semana Santa de Sevilla en España.